España, segundo destino turístico mundial en 2019, recibió un 75%
menos de visitantes extranjeros en los nueve primeros meses de este año,
a causa del impacto de la pandemia del nuevo coronavirus, según datos
oficiales publicados este martes.
Entre enero y septiembre, el
país recibió 16,8 millones de turistas, frente a los 67 millones del
mismo período de 2019, indicó en un comunicado el Instituto Nacional de
Estadística (INE).
La caída interanual es del 74,9% en uno de los
países más afectados por el nuevo coronavirus, sometido en la primavera
boreal a un estricto confinamiento domiciliario, al que se añadió un
cierre de fronteras con numerosos países.
La
caída entre mitad de marzo y final de abril fue del 100%, un dato
histórico. A partir de mayo empezaron a llegar turistas progresivamente,
pero la recuperación se frenó en seco cuando a fines de julio el Reino
Unido impuso cuarentena a los viajeros procedentes de España, donde de
nuevo se estaban incrementando los casos.
tiempos normales, anularon masivamente sus reservas estivales en los
destinos de sol y playa.
Los meses de julio y agosto,
tradicionalmente un período de temporada alta, resultaron catastróficos
con un 75% menos de turistas internacionales.
En septiembre, un
mes marcado por la intensificación de la segunda ola de la epidemia y la
aplicación de nuevas restricciones, las llegadas cayeron con fuerza, un
87% interanual.
En lo que va de 2020, Francia es el primer país
emisor de turistas, pese a haber acusado una caída interanual del 64%.
Le siguen Reino Unido (-81%) y Alemania (-76%).
El gasto de los
turistas cayó a su vez un 76% entre enero y septiembre en comparación
con los mismos meses de 2019, quedando en 17.700 millones de euros. Cada
visitante gastó de media un 22% menos que en 2019.
Las
dificultades del turismo, un sector que representa el 12% del PIB
español, están afectando gravemente a la cuarta economía de la Eurozona,
el segundo país del mundo más visitado en 2019, sólo por detrás de
Francia.
España será previsiblemente en 2020 uno de los países
occidentales con la mayor caída del PIB, un 12,8% según las últimas
previsiones del Fondo Monetario Internacional (FMI).
CREDITOS A DIARIO LIBRE