Santo Domingo.-Las altas tasas de interés y la
fluctuación del dólar representan un reto para el sector construcción,
situación que en los últimos años ha incidido afectado las ventas, ya
que la capacidad de compra de la gente se ve reducida cuando los
préstamos o hipotecarios se encarecen.
Un indicador de esto es que el pasado año el sector cerró con números negativos, pese a que inició con indicadores positivos.
Annerys Meléndez, presidente de la Asociación de Constructores y
promotores de viviendas (Acoprovi), afirmó que durante los primeros
meses de 2024, el sector mostró un crecimiento positivo, pero al
finalizar el año la tendencia se tornó negativa.
Señaló que desde la pandemia hasta el pasado año el precio de la
vivienda aumento en casi 50 %por el impuslo del costo de materiales de
construcción como cemento y acero, que subieron entre 55 y 60 %,
respectivamente.

Indicó que en enero de 2025, se registró un decrecimiento del 7.3 %
en comparación con enero de 2024. Citó que las estadísticas oficiales
indican que el pasado año el sector creció 2.1 %, un desempeño limitado.
En ese sentido, la ejecutiva destacó varios aspectos que podrían
generar cambios positivos en el sector, los cuales dijo dependen de las
autoridades, ya que no requieren necesariamente inversión pública ni
acciones del presupuesto nacional, sino voluntad política.
En este sentido, subrayó la importancia del marco regulatorio,
haciendo énfasis en la Ley de Alquileres, lo que podría duplicar la
inversión en el sector.
Instó a los legisladores y al Presidente de la República a revisar la
normativa y reintroducirla para su aprobación de manera que facilite la
resolución ágil de conflictos entre inquilinos y propietarios.
Meléndez propuso esa mejora al participar en el almuerzo del Grupo de
Comunicaciones Corripio junto a Guido Rosario, primer vicepresidente y
Rafael Aybar, segundo vicepresidente, de Acoprovi.
Impulso inversión
Meléndez entiende que la actualización de la
normativa de inquilinatos no sólo beneficiaría a los propietarios, sino
que también podría atraer capitales que actualmente no se destinan a
este sector, como los fondos de inversión.
De su lado, Guido Rosario explicó que uno de los principales
beneficios de la ley de alquileres es la mejora en la seguridad
jurídica, particularmente en lo relacionado con los desalojos, que
actualmente representan un problema considerable.
Señaló que la misma permitirá mejorar la oferta de alquileres en el
país, reducir los precios y facilitar el acceso a viviendas dignas para
los dominicanos.
De su lado, Rafael Aybar apuntó que es necesario reducir los tiempos
de espera para la obtención de permisos. Indicó que las tres entidades
encargadas de otorgarlos presentan oportunidades de optimización entre
ellas los ministerios de Turismo, Vivienda y Medio Ambiente.
En los dos últimos casos, se han registrado avances.
Destino seguro
Annerys
Meléndez aseguró que la República Dominicana es un destino seguro para
la inversión inmobiliaria y expresó que los casos de estafas reportados
no representan al sector en su conjunto.
Explicó que, según la Oficina Nacional de Estadística (ONE) actualmente hay en el país 40,400 unidades habitacionales en venta.
CREDITOS A EL DIA.